
Os puedo asegurar que nunca me imaginé escribir estas líneas. Y es lo que estoy haciendo, estoy afrontando una lección de vida, estoy muriendo en parte por dentro. Estamos devolviendo a Feli. Desde siempre he tenido algo con los perros, me gustan mucho. Esperamos a tener nuestra propia casa, a tener espacio. Tuve dos perritos antes con mis padres. Ahora quería el mío, que fuera como yo, muy activo, y que le gustara darle al coco y mucho. Había buscado rutas de senderismo por donde vivo, teníamos juegos, juguetes, una alfombra especial, compramos el mejor pienso. Le preparamos un cuarto propio, pero a mi reina le gusta dormir en mi estudio, ella manda. Leímos algo, buscamos información y yo me configuré un ChatGPT especialista en perros, un etólogo, un adiestrador especialista en cruce de pastor y border collie antes de que llegara a casa Feli. En Argentina conviví con la «Yumi», el pastor alemán de mi tía Yiya y mi tío Higinio, que en paz descanse, y que tanto me gustaba. Llevaba ya unos meses teletrabajando desde casa. Pensé que era el momento. Aunque teníamos algún recelo, yo creo que normal, tanto por las fotos que vimos de ella en internet como de nuestra propia capacidad, decidimos adoptar un cachorro y un cruce particular. La gente que me conoce sabe que cuando tomo una decisión voy a por ello. Y lo suelo poner fácil. Me entrego.

Y entonces llegó Feli derrochando vida enérgica y cataratas de amor. Entró un impulso de vida, un flujo de dulzura que desde el principio lo empezó a modificar todo, a mostrarte cosas. Eso hacen los perros. Pero tenemos que reconocer que las expectativas fueron superadas por las prestaciones de un animal hermoso. Hemos de reconocer que por mucho que pudiéramos pensarlo o planificarlo, una cosa es la teoría y otra cosa es la práctica. Feli no tiene ningún problema, es una perrita genial, espléndida, sana y da vida constantemente. Lo que tenemos que aceptar es que quizás nos viene grande, pero no porque no tengamos la capacidad de aprender a cuidarla y atenderla, sino porque necesita un tiempo que nosotros aún no tenemos, pensábamos que sí lo teníamos, pero no es así, y eso ha hecho incluso que al ppio pensáramos que la perrita era, por ejm, hiperdependiente, la mal interpretamos como padres primerizos. Incluso pensamos y llegamos a contactar a Lopecan-adiestramiento canino. Una noche en blanco me costó y ahora comprendemos que para esta aventura necesitamos modificar y suprimir otros aspectos de nuestra actual manera vivir y de lo que somos. La lección es importante. No es ella, somos nosotros. Mensaje: uno debe reconocer siempre sus límites, se debe hacer autocrítica y exponerla. Cabeza alta y corazón abierto, se debe ser honesto con uno mismo y con los demás. Y sobre todo, con esta perrita tan maravillosa.

A esto se añade que al 5 día de adopción sobrevino la noticia de un problema de salud importante a nivel familiar, el cual empezamos y seguimos gestionando como médicos que somos y que nos va a incurrir en tiempo, esfuerzo y sentimiento. Y a nivel mental ya lo estamos notando. Nuestras necesidades han cambiado y las necesidades de Feli no van a poder ser atendidas por nosotros.




Se la vamos a entregar a la asociación cuatroxcuatropatas (allí a Feli la llaman Lata) y os ruego, y por favor lo pido, difusión y una adopción responsable. Se lo merece mucho, es un amor, es preciosa, tiene un pelo sedoso, unos ojos muy bonitos, manchitas blancas en las patas y en el pecho. Es muy ágil y rápida. Tiene sólo 2 meses y 3 semanas, tiene la posibilidad de una gran vida por delante. Por favor. Es muy muy lista, le enseñé a sentarse y a tumbarse, viene, se queda quieta si se lo indicas y le encanta beber agua. Si tiene mucha sed, se sienta en la cocina porque ahí está el grifo y a veces da un mini ladrido para que le sirvas. Sabe pasear con la correa, sólo tira un pelín al ppio porque quiere jugar. Ya duerme sola y muy bien en mi estudio, entre las patas de mi silla. Su cuarto, para comer y jugar. Un día quise que durmiera ahí, pero terminé yo durmiendo en la escalera que está al lado y ella, por supuesto, en mi estudio. Es muy cariñosa, se tira de barriga todo el rato y quiere jugar mucho, es muy activa, quiere que estés siempre con ella. Pero cuando está más cansada o tranquila, le encanta los abrazos, los besos en el cuello y los mimos. Por favor, adopción responsable.


Han sido tres semanas de adopción fallida que ahora queremos entenderla como una acogida maravillosa. Nos ha enseñado tanto y queremos creer que nosotros hemos sido una pequeña ayuda para ella en este tiempo. Hemos vivido aventuras, hemos soñado juntos y hemos montado jaleo. Y para nosotros quedan nuestros secretos. A veces quiero que se vaya ya, quiero pasar la página, pero a veces no quiero. A veces sueño y luego soy realista y toco tierra. La voy a tener en mi casa hasta que le encuentren acogida. Voy a tratar de disfrutarla lo que me queda. Os dejos fotos para que la conozcáis. Os va a enamorar. Deja en mi vida una huella. Un aprendizaje. Un hermoso recuerdo.
Feli, te quiero. Gracias por tanto.
#frv. #vida.
Pd: gracias a la asociación cuatroxcuatropatas por su comprensión y acompañamiento. Enhorabuena por vuestra labor.

Deja un comentario