Los nuevos residentes de radiodiagnóstico hemos terminado la rotación por el servicio urgencias, el contacto directo y clásico con el paciente finaliza, la visión romántica de la medicina no incluye médicos sentados frente a una pantalla de ordenador. Guardemos pues el fonendo, nosotros estamos obligados a romper esa relación idílica de los médicos con este delicado utensilio.
Hemos hecho esta rotación porque los de « rayos » no tenemos que hacer guardias de urgencias en la policlínica del hospital. Reconozco que esto puede ser una desventaja para aquellos que nunca han ejercido. Las guardias son un enorme complemento para el médico recién egresado. Aprendes medicina, ves la dinámica de trabajo, la infraestructura, lo que se sufre en la puerta de urgencias, lo que hace falta y lo que sobra, lo que se hace bien y lo que no se hace tan bien, conoces gente y conoces lo que es un paciente. Todo el mundo debería hacer algo de policlínica o todo el mundo debería tener un bagaje en este apartado, en primera línea de batalla y asumiendo responsabilidades.
Por otra parte, nunca pensé en dedicarme a esta especialidad que ahora empiezo, tanto por mi culpa como por la del fracaso de la maquinaria universitaria, no la contemplé en un principio y hoy veo que era por ignorancia : No conocía la especialidad y, lo que es peor, no me conocía a mí mismo. Es fundamental practicar más y mejor durante los años de la carrera, ya no solo por adquirir los conocimientos académicos necesarios, sino porque es básico adquirir experiencia para hacerte al menos una idea general de tus actitudes y aptitudes en tu profesión. Hay que saber como eres frente a un paciente, frente a una situación estresante, frente a la rutina, frente a un superior, frente a los avatares del trabajo en grupo, frente a tu capacidad de decisión, de responsabilidad… conocer algo más el « laburo » al que piensas dedicarte, sería de mucha ayuda para elegir luego la futura especialidad. A mí me ayudó mi periplo por otras especialidades, pero yo no pensaba en hacer radiodiagnóstico, surgió por el camino.
Decido hacer rayos por lo siguiente : es amplia (demasiado amplia), los casos más interesantes del hospital van a terminar en rayos seguro, veo que puedo trabajar algo más en solitario que otras especialidades y el trato con el paciente no me agrada del todo, la labor diaria en radiología y mi ética coinciden bastante, los radiólogos estamos capacitados para discutir y argumentar con casi todos los servicios del hospital, me gusta complementar diagnósticos, tiene mucho futuro en cuanto a avances se refiere, hay salida laboral e incluso en estos tiempos difíciles siguen saliendo ofertas de empleo con las que capotear la crisis.
Los de rayos somos médicos, nos dedicamos a otro apartado, el cual creo puede ser realmente bonito, tanto por los conocimientos que adquirimos como por la utilidad de nuestra práctica diaria, no en vano muchos especialistas hablan de que sus últimos avances tratan sobre las mejoras en las técnicas de imágen y de que les gustaría tener conocimientos en ciertos aparatos. Parece que ahora mucha gente se interesa algo más por el radiodiagnóstico, ¿no?
Le damos la bienvenida a partir de Septiembre a la formación en diagnóstico por imágen, sus buenas y también sus malas caras quedarán aquí reflejadas. Pero ahora, estimado Fonendo, tenemos que hablar: Yo te quiero, pero solo como amigo, no podemos seguir juntos como hasta ahora y por eso te dejo. No eres tú, soy yo….. bueno y, si te digo la verdad, el otro se llama TAC.
Residente de Radiodiagnóstico. H.R.U de Málaga. Avda. Carlos Haya s/n. 29010 Málaga.
RadiodiagnosticAndo 
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