Seguro que sabes de lo que hablo. A veces puedes ser el centro de atención y cuando eres el centro de algo, puede que te conviertas en una diana fácil. Ser diana de la charlatanería popular tiene eso, que muchas de las opiniones son del tipo cola de la verdulería, es decir, que tienen mucho de vulgar y poco de fundamento, con todos mis respetos a la gente que vende verduras.
Ya sea sobre el trabajo, sobre tu vida amorosa (estas son de las más populares) o sobre tus aficiones; parece que saltarse la incercia de los acontecimientos y protocolos sociales (cosa que es bastante fácil) es un caldo de cultivo para que el borreguismo reaccione ¿Se consideran atacados? Seguir un curso alternativo, tener distintas inquietudes o puntos de vista diferente suscita a muchas personas, a parte de envidia, un estímulo curioso que al mismo tiempo que activa la lengua, inihibe el cerebro. Pero tranquilo, siempre les queda la marcha reversa plamada en frase «lo digo por tu bien». ¿Por qué viven tan pendientes de los demás? La crítica que se realiza en la calle con más frecuencia es la de tipo destructivo, que suele ser a escondidas, por tanto deshubicada a la vez que cobarde. Se saltan a la torera tu sensibilidad, tu dolor, tus motivaciones, tu creencias, tus valores y al fin y al cabo tu integridad. ¿Somos adultos? Pues el que lo sea que actúe como tal, es decir, lo adultos toman sus propias decisiones y arreglan sus problemas con determinación, altura y educación. No les hace falta el calor del grupillo para sentirse respaldados y sacarse las catañas del fuego, es lo que tiene ser independiente.
Pero como todo esto son opiniones y elucubraciones personales y hay miles de individualidades con miles de circunstancias y algunos con mucho tiempo libre, concluyo mi relfexión diciendo que estar pendiente de la farándula y vivir dando explicaciones no merece la pena.
Vamos a lo importante. Hay gente que se aisla de estas cosas, son gente sensible que busca el trasfondo y sobre todo vive pendiente de su propia vida respetando por ello a los demás. Hay gente que si considera que vales la pena te da cariño y te cuida. No tienen muchos motivos y en realidad no sabes por qué, pero resulta que pone la mano en el fuego por tu persona aún sin tener mucho que ganar. Es de agradecer, pienso que son individuos que viven preocupados por las cosas que de verdad importan, por ello, relativizan lo superfluo. Se cuentan con los dedos.
No mucho mas que añadir.
pd: que me quiten lo bailao.
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